
La directiva de Perú Hiroshima Kenjinkai, que preside Arturo Kawaguchi, y el Comité de Damas, presidido por Nancy Yusa, organizaron el paseo de integración de la familia hiroshimana el domingo 30 de setiembre en el colegio Hideyo Noguchi, en Chacra Cerro, donde fueron recibidos y atendidos por Juana Miyashiro, directora del plantel, así como profesores y alumnos.
A las 9:00 a.m. se reunieron en el Centro Cultural Peruano Japonés, desde donde partieron hacia Chacra Cerro en la movilidad por cortesía de Perú Hiroshima Kenjinkai.
En menos de una hora llegaron hasta Hideyo Noguchi, donde se ubicaron en el patio principal. De inmediato, conquistados por el chicharrón preparado por las profesoras, eligieron este para desayunar.
Además, tuvieron la opción de adquirir las hortalizas más frescas producidas en Chacra Cerro como el nabo, con raíz típica de Japón, y el pepino japonés.
A las 11:00 a.m., dirigidos por Manuel Yoneyama y profesoras de Hideyo Noguchi, hicieron ejercicios al ritmo de radio taiso.
En la ceremonia protocolar, la directora Juana Miyashiro les dio la bienvenida a la familia de Perú Hiroshima Kenjinkai.
Resaltó que ella tuvo la oportunidad de conocer Hiroshima cuando fue su primer viaje a Japón.
Dijo que siempre tiene presente el pedido de la paz mundial cuando visitó el Monumento de la Paz en Hiroshima.
Arturo Kawaguchi, presidente de Perú Hiroshima Kenjinkai, felicitó a Juana Miyashiro por su reconocimiento al recibir el Premio del Canciller del Japón.
La experiencia de los becarios
Valeria Kawaguchi visitó Japón del 27 de julio al 7 de agosto del 2018, invitada por la beca Youth Exchange Program in Hiroshima, Programa de Intercambio Juvenil de Hiroshima.
Agradeció a Perú Hiroshima Kenjinkai y a la prefectura de Hiroshima por la beca. Narró su nueva experiencia en la tierra natal de sus antepasados.
Alvaro Haji conoció Japón en agosto del 2018 por la invitación del Foro Internacional de Hiro-shima para Jóvenes, The Hiro-shima Junior International Forum.
El joven becario informó detalladamente sobre su nueva experiencia, en lo que fuera «un viaje inolvidable».
Informó que el foro es un evento que dura 3 días. Los participantes son chicos entre 15 y 18 años de edad, quienes aprenden de las consecuencias de estar expuestos a la radiación. «Tuvimos la oportunidad de escuchar el testimonio de los sobrevientes del bombardeo atómico de Hiro-shima y visitamos lugares como el Museo Memorial de la Paz».
Al concluir la ceremonia protocolar, se iniciaron los divertidos juegos, donde se premió a cada uno de los participantes: el payasito gordinflón, plato de pelota, barriendo, emparejados, pescando y construye y destruye.
Al mediodía, almorzaron y se deleitaron con la pachamanca preparada y servida por Juana Miyashiro. El postre fue el picarón, elaborado por las profesoras hideyinas.
Luego, el presidente Arturo Kawaguchi hizo el sorteo de la rifa. El premio mayor, una olla arrocera, se lo llevó Felisa Ono.
Enseguida, los asistentes jugaron el bingo con muchos premios. Así finalizó la integración de la familia de Hiroshima.