lunes, 28 de marzo de 2016 | 5:18 PM
Elena Gushiken Nakandakari (47) nunca pensó quedarse en Lima. Era fines de la cruenta década de los ochenta. Se animó por Economía y siguió dos ciclos en la Universidad Garcilaso de la Vega, pero después pensó en que en este país, entonces ensombrecido por el terrorismo y la debacle económica, «no había futuro». Creció en el distrito limeño de La Victoria y en 1990, con 21 años a cuestas, enrumbó a Japón. «Viajé para quedarme por mucho tiempo», asegura.