
Con danzas y canciones propias de cada prefectura Nihon mostró su riqueza cultural. Fue en la víspera de la culminación de la 41ª Semana Cultural del Japón, ante un público de Argentina, de Brasil, de Uruguay y claro de Japón y gran número de peruanos admiradores de la cultura japonesa. Abrió el programa Miyuki Ikeho, directora Dpto. de Cultura de la Asociación Peruano Japonesa.
Gerardo Maruy, maestro de ceremonia, presentó a las tiernas y dulces niñas de Perú Fukuoka Club, quienes bailaron Matsuri. Enseguida, el turno fue para las jóvenes de Fujinkai, con Unai Jima, baile típico de Okinawa. El rock pop lo pusieron niñas y jóvenes de Tokyo Toyukai, con el tema Tokio; Omanta Bayashi fue el tema que bailaron las jóvenes de Perú Hiroshima Kenjinkai.
El Centro Recreacional Ryoichi Jinnai se hizo presente con la danza okinawense Shochikubai Tsuru Kame. La música lo puso Nomura Ryu Ongaku Kyokai. El duo de las hermanas Carmen y Hilda Nagasaki hizo recordar la canción Kawa No Nagare No Youni. Las jóvenes de Perú Kumamoto se presentaron con el baile Bara Iro No Mirai.
La actuación especial fue de la familia Gushiken, de la prefectura de Okinawa, interpretando tres canciones que pertenecen a su tierra natal.
El dúo Shizuko Corac y Alexis Roncal ofrecieron Nani Wa Koi Shigure.
La Asociación Okinawense del Perú participó con danzas populares de Okinawa. La ceremonia concluyó con Matsuri.